Cinco funcionarios de la Coordinación municipal de Gestión Urbana, que opera bajo la órbita de la Secretaría de Planificación, Obras y Servicios Públicos de Trelew, renunciaron el viernes por diferencias políticas con el intendente Adrián Maderna.
Un coordinador y cuatro directores que responden a «Generación Patriótica», corriente interna del Frente de Todos, pegaron el portazo mientras el mandatario local se frotaba las manos con vigor después de encabezar el viernes un acto político en el gimnasio de Racing Club.
La llegada de los funcionarios, autodefinidos como cuadros técnicos, se concretó en el inicio del segundo período de Maderna al frente del Ejecutivo. Y fue impulsada a partir del engranado vínculo político-institucional con el Gobierno Nacional, a través de los ministerios de Turismo y Deportes; de Obras Públicas, de la Mujer, de Hábitat, el Enhosa, por mencionar ejemplos.
Propiciado el momento, a partir del clima amistoso con el Gobierno nacional, es que el equipo renunciado generó la apertura de puertas de los despachos más influyentes de Casa Rosada. Y es ahí donde se celebraron acuerdos -y las imágenes acostumbradas de funcionarios nacionales sonrientes cerca de Maderna permitiendo la disponibilidad de caudalosos recursos en beneficio de la ciudad.
Cierto es que la dimisión del coordinador, Raúl París, y quienes lo acompañaron, evidencia claras diferencias con el rumbo encaminado por el proyecto político que abraza el madernismo, ya presentado y lanzado a nivel provincial.
El propósito de quienes se alejaron del municipio es priorizar y fortalecer la estrategia del Frente de Todos y del Gobierno Nacional en Chubut y Trelew, todo lo contrario a lo que propone el «modelo» del intendente.
Los mencionados pertenecen a la agrupación política interna «No me olvides», que trabaja con «Generación Patriótica», una vertiente del Frente de Todos. En rigor, no sería descabellado imaginar nuevas dimisiones, a partir del rumbo que adoptó la gestión municipal, sumado al desgaste del proyecto que encarna Maderna, manifestado en el rechazo social.
Las diferencias no serían solo con el intendente local, también hubo en el último tiempo acentuados cortos circuitos con el actual secretario de Obras Públicas, Ricardo Quiroga, y el resto de los dirigentes que arribaron con él al Gabinete trelewense. No hubo consenso en algunos temas y desacuerdos metódicos, cuestiones que calaron hondo en aquella estratégica área municipal.