Más de 100 brigadistas trabajan en la zona cordillerana para contener el fuego. La Secretaría de Bosques coordina las tareas que se ven dificultadas por la topografía del terreno y la densidad de la vegetación.

El Gobierno del Chubut mantiene un intenso despliegue para controlar el incendio forestal en la zona de El Turbio, donde el operativo ya lleva diez días de labor ininterrumpida. Bajo la coordinación de la Secretaría de Bosques, más de 100 personas entre combatientes y personal de apoyo se encuentran abocados a la emergencia.

En las últimas horas, las cuadrillas realizaron un ataque directo con agua y herramientas manuales para sofocar focos secundarios en el flanco izquierdo. Simultáneamente, se avanzó en la construcción de una faja cortafuego, despejando material desde el sector de Puesto de Vigueras hasta el Río Turbio.

La planificación actual se centra en combatir los puntos calientes sobre la costa del río. Sin embargo, las tareas son complejas debido al «combustible vegetal pesado» encendido y las difíciles condiciones del terreno, que presentan riesgos para la seguridad del personal por el desplazamiento de material.

El dispositivo cuenta con el respaldo de medios aéreos que operan cuando el clima lo permite: tres helicópteros con helibalde, un avión hidrante y dos aviones anfibios están disponibles para asistir a los brigadistas.

Del operativo participan bases de toda la comarca (Golondrinas, Epuyén, Cholila, El Maitén y Lago Puelo), junto a la Brigada Nacional Sur, el ICE de Parques Nacionales y el SPLIF de Río Negro, con apoyo logístico del Ejército, Prefectura y Protección Ciudadana.