Juan Pablo Luque fue filmado en un acto kirchnerista aplaudiendo con entusiasmo cuando lo presentaron como el candidato del “NO” a la eliminación de los fueros. Su reacción refleja el miedo de quien sabe que sin privilegios deberá rendir cuentas ante la Justicia.
Los propios condenados por la causa Emergencia Climática señalaron a Juan Pablo Luque como “el jefe de la banda” que manejó el millonario desvío de fondos durante el desastre que afectó a Comodoro Rivadavia en 2017. La Justicia ya dictó condenas, las obras nunca se hicieron y los chubutenses todavía esperan respuestas.
Acorralado por las causas de corrupción que salpican a su gestión y a su entorno más cercano, Luque milita desesperado por conservar los fueros. En un reciente acto kirchnerista fue captado aplaudiendo con euforia cuando lo presentaron como “el candidato del NO a la eliminación de los fueros”. Una escena que, más que fervor político, muestra pánico judicial.
Mientras la provincia se prepara para votar en un plebiscito histórico que pondrá fin a los privilegios de políticos, jueces y sindicalistas, Luque se ubica en la vereda opuesta. Defiende los fueros porque sabe que sin ellos no hay blindaje y sin blindaje hay Justicia.
Incluso salió a respaldar públicamente al juez Claudio Petris, el mismo magistrado que intentó frenar el plebiscito para mantener esos privilegios. Una postura que lo distancia aún más de Despierta Chubut, el frente encabezado por Ignacio Torres y Ana Clara Romero, principales impulsores de la eliminación de los fueros y de una provincia sin impunidad.