Después de más de diez años paralizada, la obra del puente sobre la Ruta Provincial N°10 fue reactivada y finalizada en solo seis meses por el Gobierno de Ignacio Torres. El mandatario encabezó el acto junto al vicegobernador Gustavo Menna y el intendente Luka Jones, quien agradeció “la voluntad política de un gobernador que puso a 28 de Julio en la agenda de su gestión”.

El puente de 28 de Julio permaneció más de una década abandonado por los gobiernos anteriores. Hoy, con una inversión provincial de $315 millones, la gestión de Nacho Torres lo terminó en tiempo récord y reabrió la conexión vial clave entre la Ruta Nacional N°25 y la Ruta Provincial N°7.

Durante el acto, el gobernador remarcó que “esta obra simboliza el fin de la desidia y la corrupción que marcaron una época en Chubut” y destacó que “gobernar es dar respuestas a nuestros pueblos, sin distinción política ni partidaria”.

Torres comparó el caso con otras obras reactivadas: “Lo hicimos con la Doble Trocha Trelew–Madryn y lo hicimos hoy con este puente, que durante más de 10 años fue intransitable. Estamos demostrando que, con transparencia, austeridad y trabajo, las obras se terminan como corresponde”.

El intendente Luka Jones celebró la finalización del proyecto: “Después de una década de abandono, hoy 28 de Julio brilla. Este puente representa mucho más que una obra: es la muestra de que cuando hay decisión política y gestión, las cosas suceden”.

El nuevo puente y sus accesos, construidos sobre la Ruta Provincial N°10, mejorarán la conectividad del Valle Inferior del Río Chubut, fortaleciendo el desarrollo turístico y productivo de la zona. “Estamos construyendo una provincia unida, donde los pueblos del interior dejen atrás el olvido y vuelvan a crecer”, concluyó Ignacio Torres.