El gobernador Ignacio Torres aseguró que los ataques incendiarios recientes son obra de “los delincuentes de siempre” y prometió que no habrá descanso hasta que los responsables sean llevados ante la Justicia.

El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, repudió enérgicamente el atentado incendiario ocurrido en la Estancia Amancay, en la zona cordillerana de la provincia. El hecho, que se produjo a pocos días del desalojo de un grupo de personas que habían usurpado tierras en el Parque Nacional “Los Alerces”, se suma a otros focos de incendio simultáneos registrados recientemente, uno de ellos en Epuyén, que arrasó con más de 2000 hectareas y 70 viviendas.

En declaraciones oficiales, Torres señaló que estos actos violentos no son producto de la casualidad, sino que responden a una planificación metódica por parte de “los mismos delincuentes de siempre”. Además, criticó la supuesta connivencia de sectores de la Justicia que, según el gobernador, han permitido que las causas judiciales se extiendan indefinidamente, brindando impunidad a los responsables.

“A las pocas horas del desalojo en Los Alerces —sostuvo el mandatario— tuvimos tres focos de incendio simultáneos y, ayer, intentaron incendiar también la Estancia Amancay, atacando con bombas molotov y prendiendo fuego toda la maquinaria y los vehículos del lugar”.

Torres se mostró firme al advertir que el Gobierno de Chubut no se dejará “intimidar por ningún violento” y que trabajará para garantizar la seguridad de quienes residen y producen en la región. Asimismo, aseguró que la provincia no escatimará esfuerzos para que los autores de estos actos sean identificados, juzgados y cumplan las condenas correspondientes. “Quiero que todos los chubutenses sepan que no vamos a descansar hasta que estos delincuentes estén presos y los ciudadanos de bien puedan vivir tranquilos. En Chubut la ley se cumple y no les tenemos miedo”.

Con estas declaraciones, el gobernador busca llevar calma a la población y respaldar a quienes han visto sus bienes amenazados o destruidos en los ataques recientes. Al mismo tiempo, refuerza la postura oficial de no ceder ante presiones o acciones violentas que ponen en riesgo la integridad de los habitantes y el patrimonio de la provincia.