El presidente del PJ en Chubut, Gustavo Fita, cobró “gastos de traslado” de la Legislatura por una supuesta “comisión de servicios” en la Ciudad de Buenos Aires. En realidad, usó esos días para participar de una media maratón en capital. Los contribuyentes le financiaron el viaje.
El propio Gustavo Fita dejó en claro la lógica con la que se mueve la casta política: en redes sociales celebró “el privilegio de poder hacer lo que nos gusta” al mostrar su participación en la media maratón de Buenos Aires, viaje pagado por los contribuyentes de Chubut.
Según la resolución oficial de Legislatura, el viaje de Gustavo Fita entre el 22 y el 25 de agosto era por “comisión de servicios” legislativos, para trabajar. Sin embargo, las publicaciones lo delataron: entrenamientos, sesión de fotos runner y 21 kilómetros corridos en Capital Federal.
El contraste es brutal: en los papeles, Fita dijo que era un viaje de trabajo; en la realidad, fue turismo deportivo para un diputado pagado con la plata de todos los chubutenses. Otro ejemplo más de cómo los políticos usan sus privilegios para beneficio personal, esta vez por parte del líder de la bancada kirchnerista en Chubut.
Ante el escándalo, Fita intentó justificarse: dijo que el viernes viajó a Buenos Aires para participar de una actividad en La Matanza llamada Cabildo Abierto del Peronismo, Cristina Libre, y que luego aprovechó el fin de semana para correr la media maratón. Según su versión, no quiso “ir y volver” porque el lunes tenía previstas otras actividades partidarias en Capital Federal.