El intendente Juan Pablo Luque entregó dos viviendas a familias en situación de vulnerabilidad en los barrios San Cayetano y Rodríguez Peña. En ambos casos uno de sus integrantes presenta discapacidad, por lo que era esencial que cuenten con un hogar que reúna las condiciones para su cuidado. Durante la gestión se entregaron 120 viviendas a través de este programa.
La actividad se desarrolló en horas de la mañana, con la presencia del secretario de Infraestructura y Obras Públicas, Maximiliano López; el subsecretario de Hábitat, Miguel Araneda; y los concejales electos Ezequiel Cufré, Gabriela Simunovic, Ariel Montenegro y Mariela Aguilar, quienes velarán por la continuidad de esta política pública.
El programa de Viviendas Sociales forma parte de las acciones que lleva adelante la actual gestión municipal para dar respuestas a aquellas familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad y no pueden hacer frente a los costos de refacción o mejoramiento de sus hogares.
De esta manera, desde el área de Hábitat se avanza en el análisis y abordaje de cada caso para luego concretar las tareas necesarias que permitan a las familias involucradas contar con un hogar digno, construido con materiales de calidad y con las particularidades que cubran las necesidades de cada una.
En esta ocasión, el intendente Luque procedió a la entrega de dos nuevas viviendas: en primera instancia a Celia Vera, quien reside en barrio Rodríguez Peña con sus dos hijos. La familia se sostiene con los ingresos de Celia, quien percibe un monto mucho menor al salario mínimo, por lo que atraviesa una situación compleja a nivel social y económico. Además, su hija Rocío recibe tratamiento médico permanente por su condición de salud.
A continuación, el jefe comunal entregó las llaves de su hogar refaccionado a Cintia Cárdenas, quien vive en barrio San Cayetano junto a su pareja Oscar, su hijo Efraín y su hermano Jonathan, quien sufrió un accidente años atrás que dañó su médula ósea y lo dejó con discapacidad en sus piernas y brazos, encontrándose actualmente en proceso de rehabilitación.
Al respecto, Luque manifestó que “cada entrega significa encontrarnos con una historia de vida diferente. Nos da felicidad saber que cada vez que entregamos una casa, le cambiamos la vida a una familia y ese es el objetivo que nos planteamos”.
“A través de este programa, fueron muchas familias a las que les cambiamos la vida durante la gestión, con un gran trabajo de la Subsecretaría de Hábitat y el compromiso humano de la gente que trabaja en la Municipalidad para atender cada caso”, resaltó.
En esa línea, sostuvo que “no tenemos recursos económicos para construir miles de casas como necesita la ciudad, pero si para atender cientos de casos como lo venimos haciendo desde que comenzamos con este plan”.
Del mismo modo, expresó que “hay cosas que para muchos parecen pequeñas o habituales, pero esto no es así para todo el mundo. Entonces, para nosotros, que pertenecemos a un proyecto que piensa en los sectores más humildes, debemos estar presentes como Estado donde existen las necesidades más urgentes”.
Finalmente, Luque destacó que “estamos a días del final de nuestra gestión y nos pone muy contentos seguir cumpliendo con los objetivos que nos fuimos planteando”.
Estado presente
En tanto, Cintia Cárdenas indicó que “mi hermano tuvo un accidente que lamentablemente lo dejo con discapacidad en piernas y manos. Estuvo internado durante un año y 8 meses, pero hace 6 meses que me hice cargo de él y vive conmigo”.
Continuando en ese tenor, señaló que “teníamos una vivienda pequeña que no podíamos ampliar porque mi pareja se quedó sin trabajo, pero se hizo más necesario hacerlo debido a lo que sucedió con mi hermano”.
“Por ello, pedimos ayuda a Hábitat, logramos mejorar nuestra casa y al fin tenerla terminada. Esto nos cambió la vida, más que nada porque mi hermano podrá estar más cómodo, con un hogar que se adapta a su condición”, cerró.