Los gobernadores electos están en alerta por los problemas para pagar los sueldos y aguinaldos, y temen un conflicto serio en el inicio de sus mandatos. El primero en poner en duda el pago de los salarios fue el gobernador electo de Chubut, Ignacio «Nacho» Torres, a quien ahora se sumó su par de Santa Cruz, Claudio Vidal.

«Vamos a tener un gran desafío con el aguinaldo y los próximos sueldos», advirtió el designado como ministro de Trabajo de Santa Cruz, Julio Gutiérrez, también sindicalista como Vidal. «Nos dejan una provincia con compromisos salariales diferidos a propósito, lo que inevitablemente impactará negativamente en nuestro presupuesto. Los aumentos comprometidos, cuando llegue el momento de cumplirlos, tendrán repercusiones significativas». advirtió el futuro ministro de Trabajo.

El funcionario de Vidal dijo que el panorama es «complicado» y que los desafíos financieros amenazan con afectar los aguinaldos y los próximos sueldos. Gutiérrez advierte que la ejecución de las paritarias provinciales y municipales cerradas por el Ejecutivo saliente ha sido postergada, dejando «una bomba de tiempo» para la nueva administración. En el nuevo gobierno de Vidal afirman que los compromisos diferidos se suman a la carga de un presupuesto ya ajustado.

Fuente LPO