El presidente de la Cooperativa Eléctrica de Trelew, Fabricio Petrakosky, pidió al intendente Adrián Maderna «la racionalidad que debe tener el Estado» para solucionar la crisis del loteo Belgrano, y que no permita que «cualquier funcionario agarre un micrófono para hablar estupideces e instar a los vecinos a que se enganchen», tras asegurar que «hay algunas personas dentro de la Municipalidad que le hacen muy mal al intendente».
El dirigente formuló estos pedidos ante los micrófonos de FM EL CHUBUT, en el contexto de un reportaje en donde explicó con detalles la crítica situación planteada en el loteo Belgrano, como consecuencia del robo de energía por parte de 40 familias mediante conexiones clandestinas, con el aval de la Municipalidad de Trelew.
Indicó al respecto que «esta situación fue hablada en el Consejo de Administración de Cooperativa, y decidimos hacer una denuncia penal. Esto es robo de energía. Y es grave el hecho de que el propio Estado Municipal aporte lo necesario para que vuelvan a engancharse, cuando debería ser el propio estado el que debería estar poniendo orden en todo este gran desorden».
Explicó que conforme con la Ordenanza de Uso de Suelo, «todo desarrollador inmobiliario antes de lotear tiene que hacer una inversión en obras de infraestructura para asegurar a los adjudicatarios la posibilidad de contar con los servicios. En este caso no se hizo ninguna inversión, se les entregaron lotes a los vecinos, sin las obras de infraestructura correspondientes. Y no están las condiciones dadas para que estos vecinos tengan factibilidad de servicios».
Petrakosky recordó que «en octubre del año pasado suscribimos un convenio con la municipalidad para hacer una obra con un costo de 9 millones de pesos, consistente en una línea de media tensión, y poder ir avanzando con las obras de infraestructura necesarias. En este caso hablamos de una obra de unos 380 metros lineales de media tensión, con todo lo que eso conlleva: postes, cables, transformadores, etc.».
«Habíamos convenido que una vez que se concluyera ese tramo comenzaríamos con otro y así sucesivamente para ir avanzando, pero no se dan las condiciones porque estas obras se hacen con dinero, y cuando el dinero no aparece no se puede avanzar.
Después los vecinos, con las promesas de que iban a tener los servicios y con los lotes recibidos hace un año y medio o más, empezaron a construir. Terminaron de construir, se instalaron y se encontraron con que todavía no tienen los servicios. Yo no justifico esa acción, pero se han enganchado», añadió, haciendo notar que «no se pueden justificar estas cosas, pero se intenta naturalizar las conexiones ilegales y demonizar a la Cooperativa porque hizo las desconexiones».
Con relación al argumento de la Municipalidad, de que la Cooperativa se niega a recepcionar una obra ejecutada por la empresa IPE en un sector del loteo Belgrano, afirmó que «esa obra no se recibe, no por un capricho de la Cooperativa, sino porque no están dadas las condiciones técnicas ni de funcionalidad. No es tan simple como decir tiene postes, tiene cables, entonces tiene que haber energía. ¿Cómo la Cooperativa no energiza esas líneas?»
«No se energiza porque la empresa IPE abandonó la obra y hay cosas que no se han cumplido. Hay puestas a tierra que faltan, hay unos 1.200 metros de cable para acometidas que no están, hay unos 200 metros de cable que en el transcurso de la obra los han robado. Hay un sinnúmero de situaciones que hacen que los técnicos de Cooperativa no aprueben para la recepción», detalló.
Aseguró que no se trata «de un capricho ni es una cuestión política. Se trata de una cuestión técnica. Hay que hacer una obra de infraestructura y a Cooperativa no le corresponde hacerla. Le corresponde al desarrollador inmobiliario que en este caso es el Estado Municipal, que se comprometió con los vecinos a entregar esos lotes, entonces es el Estado Municipal el que tiene que invertir y avanzar en la obra de infraestructura».
«Por otro lado -resaltó- está el riesgo latente de muerte, ya sea de operarios de la Cooperativa Eléctrica, operarios que ha mandado la municipalidad que manipula las líneas ilegalmente porque está prohibido, o de alguna de las personas que utiliza estas líneas clandestinas. Está en riesgo la vida humana, que es algo que nos preocupa más que lo monetario. Puede morir gente ¿Y quién se va a hacer cargo? En este caso se va a tener que hacer responsable el funcionario que mandó a esta gente a hacer las conexiones clandestinas».
El cooperativista, afirmó que la entidad «siempre está dispuesta al diálogo. Somos la concesionaria y ellos el poder concedente. Es como si ellos fueran el papá y nosotros los hijos, pero si papá no pone orden en el asunto y encima aporta desorden, la familia es un caos».
Manifestó su deseo de que «papá ponga orden y racionalidad a todo este asunto. La Cooperativa siempre está dispuesta al diálogo, pero no se trata sólo de hablar. Tiene que aparecer dinero para hacer las obras de infraestructura. La Cooperativa quiere que todas las familias de Trelew tengan los servicios esenciales, porque nuestra Cooperativa nació con esa misión».
A modo de ejemplo de la predisposición de la Cooperativa para atender la demanda de servicios, destacó que «en el caso de los barrios Moreira III y IV nos pusimos a disposición, porque había fondos nacionales. Había una gestión para hacer y se tomó la decisión de avanzar en el tema. Hacía un año y medio que estaban dando vueltas con el asunto, había gente enojada a la que le habían prometido las obras y los proyectos no aparecían.
Entonces pusimos a disposición la oficina técnica, y en cuestión de tres meses se hicieron los proyectos, bajaron los fondos y hoy estamos haciendo las obras, al igual que en el Barrio Aonikenk, obra ésta que se está finalizando».
«Estamos presentes -acotó- pero tienen que estar las condiciones dadas. Y no es por la fuerza, sino a través del diálogo y las gestiones necesarias para contar con el dinero y se puedan hacer las obras.
Respecto del costo que demanda brindar los servicios de energía, alumbrado público y agua potable al sector en cuestión, Petrakosky explicó que se estima que el costo para dotar a un lote de esos tres servicios asciende a 2 mil dólares por cada uno aproximadamente.
El dirigente insistió más adelante en que la entidad está predispuesta al diálogo, pero que además para intentar una solución a esta difícil situación «tienen que estar las condiciones dadas para poder avanzar en ese sentido», y señaló que «a mí me preocupan estos 40 vecinos que están enganchados. Me gustaría que tuvieran sus conexiones normalizadas y para lograrlo tiene que haber plata para financiar las obras».
Recordó que la mayoría de los barrios de Trelew surgieron como asentamientos compulsivos, conformados por vecinos a los que nunca se les ocurrió robar energía, sino que hicieron las cosas ordenadamente y «con un estado presente» logrando así contar con todos los servicios.
«Así se tienen que hacer las cosas, como lo hicieron aquellos vecinos. Pero hoy parece ser que todo tiene que ser un viva la pepa. ¡Engánchense que no hay ningún problema! ¡Nosotros los ayudamos a engancharse! ¿Y qué? El propio estado diciendo eso, es una locura. El estado tiene que estar para poner orden, no para tirar más nafta al fuego y generar un caos. Estamos esperando ese nivel de racionalidad que debe tener el estado y no como algunos personajes de la política, que piden un micrófono para hablar estupideces», sentenció.
Sin ocultar su malestar, Petrakosky pidió «Que hagan las cosas como las tienen que hacer y que la corten con la politiquería barata, porque hay algunas personas dentro de la Municipalidad que le hacen muy mal al intendente. Tengo aprecio por el Intendente y espero que me esté escuchando y que no permita que cualquiera agarre un micrófono y hable estupideces para instar a los vecinos a que se enganchen».